martes, 23 de enero de 2007

Spencer Tracy y Katherine Hepburn


Joan e Inma son una pareja de cine. No sabemos si de cine cómico, porque dan risa, o de terror, porque da un poco de miedo que alguien como Joan sea el máximo responsable de la seguridad ciudadana de todo un gobierno regional, el primer defensor de vidas y haciendas. Y que su cónyuge sea teniente de alcalde de un municipio de la nombradía e importancia de Barcelona. Pero no están solos. Cada uno de ellos tiene a su lado pares de similar mérito y capacidad. Junto a Inma, Pere Portabella, que hace progresos en la lectura y comprensión de Manolito Gafotas -es un chico muy aplicado y voluntarioso- y no admite ave canora como animal de compañía, por eso prohíbe que se vendan canarios y periquitos en las pajarerías de Las Ramblas, pues la exposición pública de las mascotas atenta contra su dignidad ornitológica, al tiempo que remunera personalmente con suculentas sardinas a las focas amaestradas del zoo que bordan en el acuario su numerito para solaz de pequeños y mayores. ¿Qué decir del nivel de los compañeros de gabinete de su amante esposo? Nada. Basta con echar un rápido vistazo a sus superiores jerárquicos.
Joan desaloja okupas de buen rollito, a regañadientes, mientras Inma solicita la despenalización por tratarse de un romántico estilo de vida. Las desavenencias en política no tienen por qué trasladarse a la alcoba y viceversa. Acaso Inma sostuvo por despecho la despenalización de los okupas porque Joan no le cumplió la noche anterior y eso que ella, picarona y pizpireta, con uno de esos corpiños de puntillitas que cortan el trago, le había mordisqueado la orejita. O será que Joan cargó porra en mano contra los idolatrados okupas de Inma disgustado con su señora por airear ésta intimidades matrimoniales ante la prensa y decir que Joan era el encargado de recoger las caquitas del gato.
A los vecinos de Corbera, de Sant Cugat y de otros municipios, estas discrepancias conyugales les importan un bledo. Pero por una vez la mayoría de la población respalda el diálogo entre autoridades que por razones de convivencia se ven las vergüenzas a diario. De modo que les instamos de buena gana a que, en caso de enfado o disputa, no se encierre uno en el excusado y se den ambos la espalda.
Mal de muchos… dicen. Pero si ha de servir de consuelo a la pareja protagonista de la bitácora diremos que también han trascendido roces entre la candidata socialista, la glamourosa Ségolène Royal, y su pareja, alto dignatario a su vez del PSF, a cuenta de las promesas electorales en materia económica y fiscal. Como una comedia de enredo con trasfondo político. O La costilla de Adán, de George Cukor, con Spencer Tracy y Katherine Hepburn, a la greña en los tribunales de justicia y en casita por el uso del baño y otras minucias domésticas.
Pero no es más que una mera especulación. Nada nos alegraría más que su matrimonio sea por mucho tiempo sólido, compacto como la placa córnea de un armadillo y que décadas de felicidad conyugal les contemplen. Quizá en lugar de síntoma de una diferencia asistamos a una comunicación en clave, a un intercambio de mensajes cifrados y amorosos. Como en Espérame en el cielo, cuando el protagonista, el doble de Franco sometido a cautiverio, le dice a Chus Lampreave, su mujer, que cada vez que se toque la oreja en un reportaje del NO-DO será para decirle te quiero. Lo de buen rollito puede ser un anticipo de los promisorios abrazos que se avecinan esa noche e Inma, al ver a su maridito en el programa de turno de TV-3, le aguarda contenta y sonriente. Lo de despenalizar la okupación es una inocua travesura maquinada por Inma para que Joan se finja enojado y le aplique un atrevido y juguetón tratamiento con una buena porra recauchutada y unas esposas niqueladas.

En esta bitácora hemos evitado añadir los apellidos de los protagonistas para complacerles pues esa concesión a la patronímica tradicional les parece cosa apolillada y autoritaria, como sucede en las escuelas e institutos de bachillerato, donde los educandos no tienen apellidos. Son tan requeteprogres…

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